Miedo

Calmate corazón no llores, no grites, mantente en calma. Todo estará bien. Hemos aguardado mucho tiempo, contenido saludos, frases, mensajes, llamadas... nuestra lengua ha sido presa de mordidas lacerantes, nuestros palmas muestran las cicatrices de los puños apretados para contener el deseo de escribir o llamar.

La espera se acorta a cada momento, sólo quisiera poder resistir. Tengo un miedo agónico que no conocia hasta ahora. Miedo de llamarle y calmarme, miedo de escribirle lo que siento, miedo de que se me escape un "te he esperado tando, vuelve a quererme" pero le grito al vacio con tal de sacar eso de mi pecho, porque debo de callar.

Seco mi cara y avanzo, y aunque ada vez mas glorioso, conciente de que el mantener encendida la llama de quererte, de aguardarte, de esperar que las cosas aun tengan remedios y poder volver a correr por la calle al verte y recibirte con un abrazo... puedan ser asesinados por lo que digas o hagas o conozca de lo que ha acontecido en las últimas semanas de que nos separamos. 51 días desde aquel terrible día.

¿Y si ya no aguardas mi amor? ¿y sí encontraste a alguien más? ¿y sí ya no quieres volver? ¿y sí esta espera no...?

Siempre desde ese dia eh orado por él, por su ex novio, por mi, y por quien encontrarías después de mi y te haría más feliz y lo haria de mejor manera que yo.... y ha sido de manera sincera. Pero ahora confronto a mi deseo de recuperarte y lo obligo a callar, a transmutar, a permitirme amarte en tu felicidad aunque no sea conmigo. El cielo me pide abandonar mis deseos para entregarme a algo más.... mato mi deseo de amor.

A tantos les ha parecido locura, aferro, obstinación el que aguarde, el que crea, dijeron que sólo quiero que sientas mi espera para que por ella te quedes, dijerón que tu te irias, que no volverias, que no me quisiste ni fui prioridad, Amor sólo callalos.

La flama de amor sólo la podemos apagar tú y yo, y de mi parte la mantuve y mantendre encendida aun bajo las tormentas. Sé que haz cambiado, que has modificado y andas mutable al igual que yo, y eso aviva mi esperanza y mi temor...

Sé las consecuencias y lo que afrontaré de haber acertado y de haber errado. Las sé, las conozco y siempre las tengo presentes... ahora sólo pido no dar paso atras, no rendirme y llevar todo a su termino, confio en mi y en los cielos de que saldre victorioso ante el triunfo o el destroze de mi corazón. Pero esta noche solo dejenme sacar lo que me envenena.

En calma, paza y equilibrio, Armonia y amor incondicional, verdad y luz te deseo y me deseo, todo estará bien cuando regreses, me veras brillar y te vere libre y brillante. Caro Dio dame la paz y la entereza. Señora Mía, Estrella del Mar recurro a ti en esta noche sin luz, regresa la alegria a mis ojos. Que aun en mi miedo, terror, zozobra, incertidumbre no pierda la fe, la luz, no me sueltes (sé que nunca lo haces) me abandono en ti.

Miedo... pero es en este sentimiento donde se prueba la esperanza, el valor, la entereza y la fuerza.