Meditación de Thaïs -.Vengerov
Ahora terminé el libro "Que el Cielo la Juzgue" y quiza ahora entiendo... porque algo tan azaroso como dejarlo olvidado en lectura por más de un año ahora tiene un significado. No quiero suponer que pude haber sentido hace un año de haberlo acabado, sólo veo lo que ahora entiendo.
Quiza, al igual que Harland y para poder entenderlo ahora tuve que entender la diferencia de sus amores. Yo tuve un amor pasional corto como él, intenso y fuerte, donde no obstante mi centro era eso.. aquel objeto de amor. Y si bien no me despegue de la tierra, debo reconocer que en muchas cosas cedí para que funcionaran las cosas, hice ello mi centro de muchas formas. Aún cuando no descuidé lo demás, estaba focalizado.
Y de la misma manera, después conocí otro amor... uno que nacío lento y firmemente, que enfrento problemas, que surgio sin darse casi cuenta... de improviso y súbitamente. Pero que en lugar de cerrar los ojos y centrarlos en algo, me ayudo como a él... a ver todo hermoso, y a amar a través del amado a la creación entera, a verla diferente, y a desbordar eso en todas direcciones, por el placer de amar y amar a mi fuego... Un amor que no me constriñe sino que da vida, no sólo a mí.
Habría tanto que filosofar o decir... pero hay cosas que es mejor sólo terminarlas diciendo "Estoy sonriendo"... esperando que el viento este bien, pero cálido y amante junto a mi fuego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario