lunes, 27 de agosto de 2012

Planes



De acuerdo al plan... nada salió de acuerdo al plan, y por ello al final estuve asustado y temeroso.

Ayer esperaba ver a mi novio, mi dulce Carnero; me desperte y salí a tomar una serie de baños para estar relajado, fresco, limpioa... suave para él. Jacuzzi, vapor, sauna, turco y sauna nuevamente. Me perfume el cabello y la piel dejé y le pedí al agua que se llevara mis temores, mis pesares, que me hiciera dúctil y receptivo. Me sentí halagado pero libre, cuando ya iba a su encuentro supe que no podría ser más. Cansado y sn ganas llegue a casa hablé con él y salí aceptando la invitación de salir con unos amigos.

Salí y fue lindo y frustratante ver tantos libros en la fería que esta en el Zócalo, por azhares del destino terminé en la fiesta de mi amigo en Zona Rosa. Sumado a que nuevamente por accidente rompí mis lentes y me vi sin ellos durante toda la noche. Hacía años que esto no sucedía, tener que atento pero sabiendo que no se distingue realmente nada.

Y fuí halagado por mi apariencia sin ellos... en ese lugar, los detesto en realidad. Fue en uno anteriormente donde ví por última vez a Boreas. Es ahí donde me siento indigno de un amor como el de mi amado. Donde temo de mí y aún siendo libre no me encuentro cómodo siquiera con la idea. Que luzco tan dulce sin lentes, tan lindo.... y volvi a mi casa.

Reparé mis lentes y descansé un poco más antes de ponerme a disponer todo para cuando más tarde vería a mi amado cuando viniera como lo dijo el día previo. Limpie y aliste, no a conciencia pero si lo suficiente. Y decidí ser yo quien cocinara. Cambió el menú pero no el cariño y dedicación con el que lo hice. Si el vendría podía gastar así que usé lo que me restaba para comprar los ingredientes.

Pero no pudo venir... más tarde lo vería y en otro punto. Tarde lloviosa esperé no lloviera en mi trayecto ya que ida y vuelta serían a pie. Sin dinero y de regreso no quería importunarlo. Todo en orden, pero mi corazón broto en lágrimas abrazado a él y le compartí como me sentía. Te quiero. Volví a casa ya mas tranquilo y la desarmonía, gritos, regaños, reclamos... decidí subir a mi cuarto. Me quede dormido solo para al despertar ver horrorizado que é me había borrado/bloqueado de face diciendo que no divulgara sus errores. Me aterre.

Llamé desesperado hasta que pude obtener respuesta, una disculpa, mi llanto queriendo salir (aúnque no sé si por genuino sentimiento o histriónica forma de demostrar mi arrepentimiento, tan real y calante, perdoname) lo lamento, ya en otra ocasión otra persona por lo mismo me amonesto y al igual que como haré con él minimizar y en algunos casos nulificar la información privada entre ambos. Nadie más que él y yo debemos saber.

Y me sentí amarrado. Ya pensaba en el camino en no hacer planes, en no esperar que todo pueda fluir como tantas veces quisiera y ni siquiera por egoismo, sino por como quisiera poder compartir las cosas con quienes quiero. En mi casa (salvo con mi sobrino) no suele haber muestras expresas de afecto, Con mis amigos generalmente la relación es a distancia y esporádica, algunos no vistos nunca, otros cada tantos meses.... y que mis parejas dadas las condiciones circunstancias e individualidades, las citas o encuentros como uno soñó no siempre corresponden o son viables, aún cuando se apegue al plan.

Cierro los ojos, estoy en paz... tranquilo aún ante el terror me encontre sereno. Buscando como arreglar los problemas, mi madita voz que a veces no es discreta. A veces es mejor realmente ser amo de su silencio a esclavo de sus palabras. Y yo deba dejar de sacar tanto de forma tan transparente "a tí te gusta ventilar tu vida".... rememorado aunque distinto esta vez. Estyo tranquilo, asustado y con una nueva fractura.... pero sobreviviré y seré mejor.

Y pensando que .... al final de todo, es mejor no tener ningun plan.

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