Juro que quise irme , pero no puedo... despues de recordar uno vuelve a vivir. Eh ahi la magia del recuerdo y la tragedia de no olvidar nada.
Siento una profunda lejania con las personas, y ya no se que hacer con ello. Las atraje a mi con mi trabajo, con mi apariencia, con feromonas y trampas de araña, con mi corazón, con mi mente, con mis brazos, pero sigo sin ver a alguien a lado mio, o al menos a alguien que pueda y quiera ofrecer su pecho abierto al mio lacerado deseoso de compartir.
Dos voces gemelas me gritan, la de la empatia y razón que me explica el porque esas personas no estan conmigo, no me llaman, no las veo, no las oigo, no me buscan, no las siento, no las toco, no me quieren, no me aman...junto con la de la necesidad añeja de todo ello que no quiere escuchar más razones
Las parcas parecieran destinarme un sendero solitario contemplando, meditando y queriendo aprender, alejado de todo, con Dios y mi pensamiento como compañeros y sintiendome un hereje al buscar el amor de las criaturas aun despues de haber vislumbrado el divino.
Solo quiero poder consumirme en tus brazos ser sin rostro. Pero cada vez te siento únicamente en mi mente.
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