Sigue escribiendo

 Aram Khachaturyan - Masquerade

¿Qué es lo que deseo? en realidad no lo sé, siento que nada me falta, y aún así hay un algo que no me satisface y me hace añorar o querer algo, que sin importar donde lo busque no encuentro , veo dentro y vuelvo a ver y la luz no parece de pronto aparecer, pero todo esta bien.

Sólo quisiera quiza un descanso, pero ¿de qué? en realiad mi vida esta en paz y calma, todo en orden, solo extraño tanto moverme... ha sido tan grato al menos en parte poder volver a bailar y recuperar un poco la agilidad y capacidad de mis entumidas piernas. Pinto e ilustro y me encanta mi trabajo, siempre lo he considerado magia, crear de la nada imagenes que de pronto cobran forma, las imagenes de mi cabeza se vuelven visibles. Canto y me siento libre, pinto y me agrada, bailo y soy feliz... pero en la realidad tengo que escribir y redactar, lo cual si bien me encanta, dejo de ser placentero cuando mi tesis y trabajo empezo a  ser reacomodado, cuando le perdí el interes al saber que lo sé y ver que de pronto me confundo de no saber a donde me llevará este camino.

Quiza sea momento de que deje de pensar en que quiero obtener y simplemente lo haga. Aún puedo ponerme al corriente con el trabajo que me falta... fialmente las cosas que he buscado para llenar el vacío no parecen servir de mucho. Indolente, insipido, ya no es placentero... quisiera poder llevar una vida tranquila, lejos de todo pero cerca de tantos.

Ansío tanto de pronto un jardín, un no depender de tanto y sentirme de pronto una orquidea parásita que aún requiere de su árbol para poder brillar. Que mi trabajo redituara, pero ¿por qué nadie me recomienda? ¿cómo es que dicen que puedo hacer tantas cosas pero nadie llama? me siento una flor abandonada, un bailarín bailando en medio de un escenario que no tiene espectadores. Llamo y llamo y los invitados no vienen, ¿acaso el cisne dejo de enamorar? dónde estan mis plumas de gala... otrora quemé el mundo mágico donde tanto me consolaba, y ahora no puedo encontrarlo en ningun sitio... aprendí mucho, crecí, maduré, pero.... quiero de nuevo mi jardín. El parnaso que una vez vi arder.

No quiero desear ni anhelar nada, sólo debería moverme... pero me siento en un baile de mascaras, la música avanza, las horas pasan, pero el baile continua... sin embargo, ese momento mágico por el cual todo valió la pena de pronto parece esfumarse, será acaso que temo que saliendo de la universidad el sueño se desvanezca y me enfrente a la realidad que no permite que vueles... Miguel Ángel, Durero... tantos tuvierón un mecenas que los dejo brillar, La Callas, El Greco... tantos tuvierón que buscar brillar... y yo aquí evadiendo las cosas, queríendo que me permitan bailar de nuevo.

¡Quémenme ! quiero arder de nuevo... debo incendiar mis alas, quiero salir de este estado de abatimiento y muerte lenta que se cierne sobre de mis brazos, mis dedos... sólo las piernas parecen querer seguir moviendose, no escribo; todas las cosas estan en mi cabeza... ¿por qué no puedo simplemente sentarme a escribir? sólo quisiera un abrazo, poder ver películas, recordar lo que es ver una serie de televisión, ir al cine, salir a bailar, ver a mis amigos y pasar las tardes... quiero que me dejen tener la juventud y vida que siempre ví desde una vitrina. Soy el hermoso muñeco con quien nadie jugó. Quiero ser libre... pero lo soy, entonces no sé que es lo que quiero.

Me muevo al compás del vals, sueño, me veo cantando, pintando, ilustrando, escribiendo... pero todo se nubla de pronto, trabajos, tesis, tareas, compromisos, cumplir con lo que el jefe dice, luchar por salir a flote en un mercado saturado y de pronto indolente... quiero sacar todo lo que ruge en mi corazón... pero no sé cómo, no hay tiempo, no hay modo, no hay financiamiento... yo sólo quería ser feliz. Tuve que dejar las aras de Dios, los escenarios, oculté mis vestuarios, mi maquillaje, los zapatos, doblé mi ropa de danza —que yace en un cajón llamándome como un cuerpo en mausoleo que me dice "estoy vivo"— , los pinceles a un lado, hay que escribir, no cantes no hay tiempo de audicionar, hay que trabajar, hay que mantenerse solo, hay que pagar las cuentas... Y sigo bailando al compás del vals.

De esa música psicótica que me dice "baila y no pienses, sólo es un baile de máscaras, puedes ser lo que quieras", el amigo buscado, el trabajador feliz, el que bailaba, que canta, que escribe, que pinta, que ilustra, diseña, investiga ... pero no sé cómo. Bailo en medio de la oscuridad,... tengo que escribir. No hay tiempo que perder, cuartilla a cuartilla desgranar mi argumento.... ¿llegará a donde tenga que llegar? Dios mio... apiádate de la extraviada.

Denme las camelias que no pude cultivar, regresen del tiempo: orquideas que no pudierón florecer. No debo añorar el pasado ni un futuro de quimeras... sólo debo escribir. Abrázenme, sólo quiero desahogarme, aún el sueño es posible mientras la mascarada no se desvanezca... mientras no llegue la mañana tendré la esperanza de que algo pase... ¿cómo me prendo en llamas?

"Todo llegará a su tiempo" casí 3 décadas y sigo esperando. Sólo quise tantas cosas, pero no es momento de hacer  lo que quiero, sino de hacer lo correcto. Ese libro, ese texto puede servir de base para ayudar a reconocer las diferencias de la gente, para darle voz a quienes son olvidados al comunicar, para dar tanto.. sólo son 6 meses... por favor: Cisne resiste y sigue escribiendo.