Amor mío, ¿como haz mutado tanto?
¿cúando fue que empecé a desear verte llorando?
¿cuando quise verte sufriente?
¿cuando ya no fuiste valiente,
y empecé a verte sollozando.?
Ya no quiero defenderte de las furias,
ya no quiero reclamarte al hado,
ya no quiero verme besado
¡por esa boca tan mentirosa!
Ya no te extraño añoroso,
ya no te pienso gustoso,
ya ni siquiera quisiera pensarte,
pero mi torpe pecho amante
quisiera saber si algún día;
quiza me extrañaste...
Ya no quiero consolar tu llanto,
ya no quiero cargar con tu pecho,
ya no quiero verte en mi lecho:
ya no quiero extrañarte tanto.
Olvidar a quien me levanto el puño,
olvidar a quien jamás nunca pudo,
...decir me quería y era gustoso.
Llévete el hado, olvídelo todo,
que al fin ya es lodo,
lo mucho te quise...
No hay comentarios:
Publicar un comentario